La sesión del claustre de 5 de diciembre comenzó con una multitudinaria protesta del personal de la Universitat contra la decisión del rectorado de imponer un sistema de fichaje sin negociación previa.

La protesta, que comenzó en el Hall del paraninfo, se trasladó al interior cuando el Rector entró. Trabajadoras y trabajadores, de forma pacífica pero contundente, pidieron la negociación y la dimisión del Gerente.

Tras tratar los puntos del orden del día, se abrió el turno de palabra, donde las personas claustrales trasladamos preguntas y sugerencias al Rector, pero, como es habitual en la dirección de la Universitat, las respuestas fueron vagas y elusivas.

Destacamos las que realizaron las personas claustrales avaladas por STEPV

Puestos estructurales cubiertos con contratos laborales temporales

Vicent Julià le recordó al Rector que una de las asignaturas pendientes de la UPV es el personal laboral de investigación que ocupan puestos estructurales, pero encadenan contratos temporales, bordeando la ley por la parte de fuera. Este colectivo es muy vulnerable y vive en la incertidumbre.

El Rector, aunque reconoció que el problema existe, no dio ninguna solución concreta, y utilizó las excusas gastadas que no deberían servir para todo: La tasa de reposición, la infrafinanciación, etc.

Carrera profesional del personal interino

Olaya Martínez intervino para preguntar al Rector y al Gerente porqué en la UPV el personal interino aún no ha cobrado la carrera profesional, mientras la Universitat de València ha estado pagándola desde el mes de julio.

Aunque en primera instancia el Rector esquivó la pregunta, ante la insistencia de Olaya, al  final hizo la autocrítica de que alguna cosa estábamos haciendo mal aquí si la universidad vecina llevaba 5 meses pagándola y nosotros no, lo  que no pareció gustarle al Gerente basándonos en la cara que puso.

Fichaje y plan concilia

Sergi Panella le aclaró al Rector que las protestas con las que se inició el claustro y donde se pidió de forma reiterada la dimisión del Gerente, se debían a la obstinación continua de su administración a imponer cambios sin contar con las trabajadoras y trabajadores de la Universitat.

En el caso del fichaje, además se está vulnerando el derecho que reconoce el mismo decreto que quieren aplicar. Por lo que le pidió una reflexión y un cambio de actitud.

También le recordó que hacía casi un año que las organizaciones sindicales le estaban reclamando una actualización del Plan Concilia, la normativa que regula permisos, licencias, jornada, horarios, vacaciones, etc. El personal de la UPV tiene en estos momentos menos derechos y más obligaciones que el personal al servicio de cualquier otra administración del País Valencià, y sin la actualización de esta norma no tiene sentido el control horario.

La respuesta la dio el Gerente que insistió en que no hay obligación de negociación porque no se introducen cambios en las condiciones laborales del personal. Demostrando, de nuevo, la fantasía de nuestra organización para interpretar párrafos como éste: “Mediante negociación colectiva o acuerdo de empresa o, en su defecto, decisión del empresario previa consulta con los representantes legales de los trabajadores en la empresa, se organizará y documentará este registro de jornada.

Riesgos en los laboratorios

En una de sus intervenciones, y en relación a los riesgos laborales existentes en la Universitat, el Rector sentenció que “SI EN UN LABORATORIO HAY RIESGOS QUE NO SE TRABAJE”.

Esta afirmación provocó la indignación de Fátima Romero, que además de representante del PAS en el claustro, es delegada de prevención. Fátima, tomó la palabra para indicarle al Rector que esta aseveración demostraba el desconocimiento de la realidad de su universidad, porque si la conociera sabría que, con esta instrucción, se cerrarçian prácticamente todos los laboratorios.

También le recordó, una vez más, la falta de cumplimiento de la ley de prevención, la falta de recursos preventivos, y el perjuicio para la salud que esto está suponiendo para un gran número de trabajadoras y trabajadores de la UPV.

Ni el Rector, ni la Vicerrectora con competencias en seguridad y salud dieron ninguna respuesta clara, limitándose a divagar.

Limitaciones de la libertad de reunión, organización y expresión de los alumnos

Varias personas que representan al estudiantado en el claustro, reivindicaron una subida y una equiparación en las remuneraciones de las prácticas de empresa en la UPV.

Uno de ellos, además, denunció los intentos de boicot por parte de la dirección de algunos centros de las acciones que como colectivo están desarrollando: les quitan los carteles, el personal de seguridad vigila las asambleas, etc.

El Rector cuestionó la credibilidad del estudiante al decir que en la UPV hay libertad de expresión. En este momento, Carmen García representante del PAS en el claustro, que había asistido a la asamblea, corroboró el relato, explicándole al Rector que, incluso, el personal de seguridad le había impedido tomar fotografías.