Después de una larga reivindicación, la UPV ha aprobado asumir la cuota patronal de la Seguridad Social de los contratos postdoctorales Margarita Salas, que había descontado del salario de los investigadores. Esta práctica vulneraba la normativa laboral, puesto que la cuota patronal tiene que ser abonada por la empresa, no por los trabajadores.

El sindicato STEPV fue clave al destapar y denunciar esta situación: en junio de 2022 presentó una denuncia ante la Inspección de Trabajo, que acabó dándole la razón y abriendo actas de infracción contra la UPV. Además, diferentes sentencias judiciales han confirmado que estas retenciones eran ilegales y perjudicaban gravemente los derechos de los afectados, incluyendo su base de cotización.

Ahora, el Consejo de Gobierno de la UPV ha rectificado oficialmente: la universidad pagará la cuota empresarial con cargo a su presupuesto. Es una clara victoria sindical, impulsada por la acción decidida de STEPV y la movilización del personal investigador.